Breve historia de la truficultura en Teruel
La Asociación de Recolectores y Cultivadores de Trufa de la Provincia de Teruel, conocida por el acrónimo ATRUTER, fue creada a finales de 1997.
Para encontrar los primeros pasos que favorecieron la creación de esta Asociación, debemos hacer referencia antes al inicio de la actividad en cuestión: la Truficultura.
El aprovechamiento de la trufa silvestre en España comenzó en Cataluña, por recolectores franceses, y fue propagándose hacia el sur y el oeste de nuestra Península siempre con un cierto trasfondo de “picaresca”, ya que aquellos primeros buscadores ocultaban su actividad.
En la provincia de Teruel se empezó a conocer la trufa, Tuber Melanosporum Vitt., por las gentes del lugar, a principios de 1960, si bien hacía ya años que era recogida “sigilosamente” por buscadores de otras regiones españolas. Con el tiempo, sabiendo ya la enorme riqueza que escondían nuestros encinares pedregosos, se fueron creando cotos en los respectivos municipios, donde se recolectaba la trufa y se vendía posteriormente a intermediarios.
Aquel tipo de vegetación, ideal para la trufa, se conformó en gran parte debido a la acción del hombre. El aprovechamiento de leñas de encina, el pastoreo extensivo, etc., contribuyeron notoriamente a la creación de este paisaje. Sin embargo, todos estos aprovechamientos que conforman ese equilibrio inestable se abandonaron en la época del desarrollo industrial. En aquel tiempo se produjo el abandono del campo, con lo que la cubierta vegetal aumentó haciéndose cada vez más impenetrable para el sol y para el hombre.
Este hecho y la abusiva recolección en zonas truferas naturales ha dado como resultado un descenso enorme de la producción. Por ello, los agricultores y recolectores de trufa que no emigraron por aquel entonces se han tenido que preocupar hasta hoy en día no sólo de plantar encinas micorrizadas -que en eso consiste precisamente la truficultura-, sino también en conservar y mejorar los montes truferos.
La Asociación de Truficultores de Teruel
Los orígenes o, por así decirlo, el primer atisbo de lo que hoy es esta Asociación lo encontramos a principios de los años noventa. Por aquel entonces, varios truficultores de la zona consideran la necesidad de agruparse con el fin de influir y colaborar en la gestión de actuaciones y ayudas que concedan las distintas administraciones para el desarrollo de este sector, así como de velar por la defensa de los intereses de truficultores y recolectores de trufa de esta tierra frente a cualquier tipo de actuación.
A pesar de aquellas necesidades, la Asociación en sí no se constituye legalmente hasta finales de 1997. Es en este año cuando varios truficultores acuerdan en Asamblea General la constitución de la “Asociación de Cultivadores y Recolectores de Trufa de la Provincia de Teruel”, aprobando a continuación los Estatutos por los que se regirá esta Asociación y la Junta Directiva de la misma.